Trabajó de lunes a domingo vendiendo tetas y bofló recorriendo las calles de Tucupita
Ante el inicio del nuevo año escolar en Venezuela, algunos padres en Tucupita lograron cubrir los gastos escolares de sus hijos, no obstante, otros tuvieron que sacrificar o disminuir la compra de alimentos para que sus niños regresaran a clases con todos sus útiles.
Tal es el caso del señor Franklin Guaita, padre de familia oriundo del municipio Pedernales, quien tiene cuatro niños estudiando en la capital del estado Delta Amacuro y no cuenta con un salario mínimo. Reveló que sobrevive con la venta de boflós y chicha.
Para Guaita en un principio, su prioridad era comprar suficiente comida, sin embargo, a pocas semanas del inicio del año escolar, optó por reducir la compra de alimentos para poder adquirir los útiles escolares. Para lograrlo, tuvo que trabajar de lunes a domingo.
“Es un poquito el esfuerzo que uno tiene que hacer cuando no tiene un salario por el gobierno”, expresó.
El pasado lunes 15 de septiembre iniciaron las actividades escolares en todo el país, y como siempre, Franklin Guaita logró llevar a sus hijos a la escuela con todos los útiles que pudo comprar con su esfuerzo.
“Yo vivo cerca de Traki, por La Bandera, y llevé a mis hijos caminando ayer a la escuela que está cerca”, comentó.
El aumento del dólar dificulta la adquisición de útiles escolares en Tucupita, sin embargo, como Franklin Guaita, varios padres y representantes se vieron en la obligación de sacrificar algunas cosas para que sus hijos pudieran asistir a clases.