
Rosendo Mata superó el medio cupón con la mirada puesta en los 90 de su señora madre
En pleno fervor de sus cincuenta y uno, el dueño y señor del escritorio contable Rosendo Mata y Asociados, puede jactarse de haber vivido muchas vidas en una.
Penitente del amor, al que no renuncia a pesar de haber llevado uno que otro chasquito, sigue apostando bienes y fortuna a la mujer, de las proporciones y color de piel que sea, a la que tiene en un altar.
Boxeador y periodista frustrado, abandonó en el ring luego que le dieran una “mano”, con el gimnasio a reventar, tirándolo largo a largo.

La comunicación la ejerce en la cotidianidad, siendo laureado sobre “Toti”, Humberto y Arcadio, como el mayor y mejor conocedor de la farándula deltana.
Con la cartera de clientes más grande del Delta, a pesar de ser un desordenado congénito, tiene fama de resolver y lo hace.
Nervioso y agitado, con permanente frenesí, como si fueran sus últimos 60 minutos, recorre a diario su ciudad natal de un sitio a otro, saludando a todo aquel que se le cruza en el camino, siendo una figura familiar.

Habiendo regresado de la muerte, agarró renovado impulso sintiéndose dueño y señor del planeta.
A este hombre de la Tucupita de ayer, sana y coloquial, si algo Dios le quitó, se lo devolvió con creces. El Señor premia a los buenos.
Feliz cumpleaños.
