9 años se cumplieron el 16 de noviembre de la gran final del II Campeonato Mundial de Fútbol de Salón Femenino y aún celebrábamos embargados de alegría el segundo lugar conquistado por la selección Venezuela en el marco de un acontecimiento extraordinario
El tachirense Oscar Villamizar, quien dictaba las pautas de la selección, entrenador sabio, estaba pendiente de todos los detalles, considerando cualquiera de ellos igual de importante para cumplir con el propósito de estar en la final.
En dicho certamen no hubo dudas de que los mejores equipos fueron la representación de Colombia y Venezuela. La divisa vinotinto actuó como la mejor familia, sobresaliendo el trabajo en equipo, cual aceitado engranaje.
Cada contrincante que se enfrentó al seleccionado tricolor, representativo en grado sumo del gentilicio venezolano, sintió el rigor de la alta calidad de juego que demostraron las «chamas de Villamizar» en todas sus líneas.
Es de destacar que, desde la portería resguardada por la mejor cancerbera del amplio mundo del fútbol de salón, como lo es la mirandina Marinel Arguinzones, hasta la línea de ataque comandada por la gran capitana aragüeña, Yuceilys Camargo, así como el resto de las chicas de la selección, fue un equipo contundente en ataque, teniendo presente que todas jugadoras hacían goles. Huelga decir que ha sido hasta ahora en deportes colectivos, la más sobresaliente representación venezolana.
Las salonistas Marinel Arguinzones, Narvelis Rondón, Gabriela Viloria, Yunelis Hernández, Mireya Fermín, Yessica Rodríguez, Karla Romero, Astrid Miquilena, Petra Cabrera, Johana Fernández, Alejandra Prieto y Yucelys Camargo, hicieron posible que más de treinta millones de venezolanos soñaran con el título, cuando Yucelys Camargo dibujó de manera poética un golazo en la portería de la selección colombiana en la gran final.
Un gol que dio motivos para que una persona, que por prudencia no identificaré, dijera: “¿…y ahora, que hará ese equipo con ese tronco de juego defensivo que tiene Venezuela?” No era para menos, en la banca de las nuestras estaba dirigiendo el mejor, además de estar respaldado por un excelente equipo técnico, que ofrecía garantías en el último encuentro del II Mundial.
Es la oportunidad de recordar a las heroínas del 2013, tras protagonizar un evento inolvidable en la memoria patria. Esas mujeres conformaron la selección de Venezuela ¡¡¡Grande!!!, que siempre fue para más en los sucesivos años, ¡felicidades muchachas!
Amigas y amigos de éste su espacio, con el favor de Dios será hasta la próxima oportunidad. Para contactos @Joseceden o por Facebook / José E Cedeño Gonzalez (el hijo mayor de Otilia Gonzalez).
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