Unas 50 personas de la ruta sur de Tucupita quedaron “varadas” durante al menos tres horas esperando algún transporte para poder arribar a sus hogares. Estos usuarios estuvieron desde las 4:30 p.m. hasta las 7:00 de la noche. Además, aseguran que no es la primera, segunda ni tercera vez que esto sucede.
Algunas personas optaron por pagar un taxi en 10 dólares para lograr llegar hasta sus hogares, ya que no había transporte durante la tarde-noche del martes 21 de octubre. Otros lograron irse a casa de cola con sus conocidos.
Se pudo conocer que son usuarios del sector Volcán, Carapal de Guara, Cajón, entre otras comunidades de la parroquia Juan Millán.
¿Por qué no hay transporte durante las tardes?
Juan Cedeño, conductor de una unidad de autobús de la ruta Macareito-Centro, explicó que solo puede surtirse con 60 litros dos veces por semana, lo cual resulta insuficiente para cubrir la distancia que recorre diariamente.
“Nos toca regresar a las colas apenas se nos acaba la gasolina. No podemos mantener el servicio así. La gente se molesta, pero nosotros también estamos atrapados en esta situación”, expresó Cedeño.
Otro chófer, Hernán Palomo, conductor de la línea Volcán, dijo que la mayoría de los carros están “eperolaos” (en mal estado) y que el combustible es cada vez más difícil de conseguir.
“Ya no sabemos qué hacer. A veces pasamos días sin trabajar porque no hay gasolina. Y cuando llega, no alcanza para todos. Esto está afectando a todos”, comentó Palomo.
La cantidad de gasolina que reciben es mínima y no cubre ni siquiera una jornada completa de trabajo. Los autobuses están estacionados y los conductores, desesperados, hacen largas colas en las estaciones de servicio con la esperanza de conseguir combustible.
Trabajadores han reportado ausencias laborales, estudiantes han perdido clases y pacientes han tenido que cancelar citas médicas por no poder trasladarse.
