Finalmente lo detuvieron por ultraje al funcionario
Hasta seis funcionarios de la Dirección del Servicio de Investigación Penal (DSIP) de Polidelta, fueron necesarios para reducir a un llanero que estaba siendo requerido por presuntamente cobrar una deuda, sin autorización de la persona a quien le debían.
En su búsqueda, lo encontraron discutiendo acaloradamente con una dama este miércoles, en el cruce de las calles Petión con La Paz. Al indicarle que bajara el tono, este se alteró aún más y la emprendió contra la comisión policial, viéndose obligados a reducirlo.
Explicó el inquieto Com/J Galindo Herrera, jefe de la DSIP, “le aplicamos una técnica de derribo y esposamiento, trasladándolo al comando. A su fuerza de veguero, se le impuso la garra del gavilán”.
Según las investigaciones, el aprehendido ejecutaba el papel de cobrador “chimbo”. Al parecer, escuchaba a sus conocidos hablar sobre las deudas contraídas en isla de Guara, estado Monagas, por compradores de productos del campo de Tucupita, acercándose a la capital deltana a solicitar el pago para su beneficio.
Cuando los acreedores se acercaban a exigir el reembolso del dinero, se encontraban conque lo habían efectuado. Un misterioso recaudador se les había adelantado.
Enterado el P/C. Esp. Belmory Medina, director de POLIDELTA, ordenó rastrearlo hasta bajo las piedras, dándole caza la antesala del 1 de mayo.
En reclusión policial, sin caballo para escapar ni plata que recolectar, a E. J. Cedeño Moreno de 38 años, le corresponde enfrentar la justicia.
