Han transcurrido 24 días desde que fuera hallado su cuerpo a orillas del caño Manamo en Tucupita
Najobú: término warao que significa “buscar”.
La investigación desarrollada en torno a la identificación y captura de los asesinos del soquero -rey de la soca- warao, parece haber perdido vigor.
Al punto que, empleando parte de la letra de una hermosa canción de Juan Luis Guerra, no sabríamos expresar si está “fría, fría, como agua del río o caliente como agua de la fuente”.
Según voceros extraoficiales, se mantiene en un círculo vicioso, que no permite avanzar.
Luego de las esperanzadoras noticias acerca de la captura de dos sujetos por parte del Cicpc y una dama en operativo de la DSIP Polidelta, se cayó en un limbo.
Deseosos de colaborar, hemos emprendido una campaña destinada a reforzar los afanes de búsqueda con la esperanza de que los responsables caigan pronto.
Mucho quisiéramos que, en un país, cuyo aparato de seguridad presume de estar conformado por las fuerzas cívico militares policiales, todas, en conjunto, pusieran su granito de arena contribuyendo a las pesquisas.
Ante las dificultades expresadas, constatadas en los lentos avances del proceso, hacemos el llamado a la ciudadanía a apoyar.
No solo por el hecho de darle reposo al alma de nuestro querido Luis “kaki” Baeza, también por la necesidad manifiesta de extirpar unos criminales de las calles y ponerlos tras las rejas.
El Cicpc, órgano de investigación penal por excelencia, guía las pesquisas. DESIP Polidelta y Politucupita están prestos y dispuestos a tender sus manos.
