Es primero en la lista al parlamento nacional de un sector opositor
El ingeniero y constructor de la influyente familia árabe, permanece a lomos de Un Nuevo Tiempo (UNT).
Aquejado por la desaparición de su gran mentor, el difunto José Abchi, y dolido por la partida reciente de dos de sus tíos, Fuad y Samir, mantiene intactas las aspiraciones de figurar en la escena publica y hacerse con una cuota de poder.
Vinculado a Manuel Rosales hace una década, ha visto como el partido que combina los colores amarillo, azul y rojo en la imagen de su tarjeta, con el sol incandescente del Zulia, sobre una casita maracaibera en la que cabe Venezuela, se levanta y hunde como la marea.
Si algo han demostrado los verdaderos políticos, personificados en: Henrique Capriles Radonski, Luis Eduardo Martínez y el propio Rosales, es que, como dijera Emeri Mata Millán y ejemplificara Rafael Caldera, la política es para los políticos y el político lo es, hasta que muera.
En la reciente encrucijada, con un gobierno urgido de condescender ante los “gringos” para percibir las divisas de la explotación petrolera, necesitado de actores que muestren a los del norte, que la única oposición vigente no es la de MCM y nuestra democracia no es solo una fachada, los tres mosqueteros (Capriles, Rosales y LEM) y una legión de espadachines siguiendo sus pasos, aprovechan las fisuras que se van abriendo en el fortín de la revolución para intentar colarse, proyectando sus candidatos y sacando réditos de la actual situación.
Es así como Michel, frio y calculador, en el marco del asueto de la semana mayor, maniobró desde el iPhone, colocando su nombre en la plancha, cuyo nombre más difundido es el de Jesús “Hidalgo” Chugabi, candidato a gobernador y segundo de la lista a la AN, a la par de Sandy Rosas, catapultado a la legislatura estatal.
Al amante del baloncesto, las playas le distendieron el pensamiento, impulsándolo a surfear en la ola alta de Un Nuevo Tiempo, que sabe Dios cuando pasará.
