
Madre e hijo empezaron de igual forma
Yelitza, en un gesto de osadía, aprovechando la oportunidad que le brindaron aquel lejano 2.000. Asnardo con el respaldo de su progenitora.
En ese entonces, Santaella venia de ser concejala y fungía como parlamentaria estatal. Rodríguez atesora experiencia administrativa en calidad de director de Despacho del Ministerio del Poder Popular para la Educación.
La dama optó por el interinato, en teoría temporal, para ceder luego la oportunidad al candidato formal. El primogénito asumirá con miras a alcanzar, a través del voto popular, la titularidad del cargo.

La historia aconteció al revés de cómo se proyectaba y la actual ministra de la Mujer, retando al propio comandante Chávez, con un partido recién creado, denominado “Mi gente”, obtuvo un rotundo triunfo electoral. El jefe del Súper Bigote deltano, nació enmantillado, lo amparan el PSUV y la “avanzadora”.
Con un cumulo de experiencia a sus espaldas, hará lo posible por apuntalar a su muchacho, dando continuidad al apellido en las lides del poder. Consciente de la influencia y sapiencia de la autora de sus días, el “pichón de político” se dejará llevar.
La clavellinera se presentó en el despacho presidencial, a una semana de su primera victoria y el de Barinas, la llenó de elogios, pactando con ella hasta su desaparición física. El retoño recogió los frutos de una dilatada y exitosa trayectoria, correspondiéndole ahora sembrar.
Con un punto de partida similar, toca ver si el Junior podrá igualar a su mamá.
