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Carlos Vásquez, un representante que fue abordado en Tucupita, manifestó que no ha podido enviar a su nieta a la escuela porque su bajo salario no le ha permitido comprar útiles y uniformes escolares.
De acuerdo con el testimonio de Vásquez, “yo voy a ser implícito en esta situación, no envié a mi nieta porque mis recursos no me dan para comprarle un par de zapatos nuevos, un mono, un bolso y al menos un cuaderno”.
Indicó que durante esta semana tratará de “hacer lo posible” por comprarle los útiles y uniformes «para ver si la envío la segunda semana».
“La mejor herencia de un padre es dejarles la educación a los muchachos, a pesar de lo que está pasando”, declaró.
Para lograr costear la compra de los uniformes escolares, un trabajador debe gastar entre 43 o 60 dólares, mientras que, para los útiles escolares, la cantidad que se debe desembolsar es de más de 10 dólares, aproximadamente.
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