
Los comunicadores que arriban a funciones de gobierno a través del voto popular nunca repiten
El caso más emblemático fue el del difunto José Gregorio Toro, en su primer y único abordaje a la Asamblea Legislativa estadal.
Toro no solo no repitió, también padeció el desplome de su vida personal en Tucupita, viéndose obligado a retornar a la casa materna en Caicara del Orinoco, donde finalmente falleció.
Más joven y ambicioso, sobre Wildell nos preguntamos, ¿de cuánto margen dispone para maniobrar?

Conectado con varios líderes locales, en control de una tarjeta nacional, bajo la sombra de la gobernadora, aspira repetir.
Experto en establecer alianzas momentáneas que lo han empinado en la arena pública, parece haber agotado los trucos bajo la manga.
En el CLBEDA intentó el abordaje a la presidencia, encontrándose con un muro en la figura del difunto Carlos Brito.

De su pasado se recoge la cercanía a Yelitza Santaella, Alexis González, Jesús Hidalgo “Chugaby”, José Antonio España -la más fructífera- y, últimamente, Lizeta Hernández.
¿Que sigue para él?, tomando en cuenta que se mueve en un terreno complejo, el de las indefiniciones o arenas movedizas de la política.
¿Se acabó su buena estrella?

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