La Gran Farsa I

Pompilio Monroy Perales

Cuando revisamos los Manifiestos, Proclamas, Discursos, Declaraciones, Juramentos, “Lecciones Magistrales”, y demás peroratas demagógicas de Chávez, su sucesor, y altos enchufados, y los confrontamos con la realidad sufriente de Venezuela, la conclusión es obvia: se trata de una gran farsa urdida y aplicada desde hace 21 años para engañar incautos desinformados.  Veamos algunos ejemplos que lo confirman:

1: He aquí una cita textual del Manifiesto del MBR-200 para tratar de justificar el traidor y fallido golpe de Estado militar contra la Democracia en febrero de 1.992: “ El agotamiento del estado venezolano, y por consiguiente de su forma de gobierno, se presenta como situación alarmante y de extrema gravedad, que ha conducido a la sociedad venezolana a la más profunda crisis económica, política, social, moral, y de identidad de toda su historia… …una deuda impagable, cada vez más elevada; mayor dependencia de entes financieros internacionales… corrupción de todo tipo, en todas las instancias públicas y privadas… inclusive los partidos del status; narcotráfico, tráfico de influencias, venalidad en la justicia, caos en la prestación de los servicios públicos, particularmente los de salud….inseguridad social.  Estos son algunos de los aspectos que caracterizan la gran crisis general que vive Venezuela… (crisis) moralmente más condenable si se observa que en los últimos 15 años el país ha contado con cuantiosos recursos económicos jamás imaginado que solo han servido y permitido una acelerada perversión social y de la dirigencia del país…….”

   Estimados lectores: ¡Sáquenle punta a ese lápiz. Comparen y juzguen. Ahora, bajo el socialismo, la situación es mucho peor!

   2: La naturaleza de farsante de Chávez se acentuó durante la campaña presidencial 1997-1998. El 5 de Diciembre de 1998, en entrevista de UNIVISION, le mintió tres veces al periodista Jorge Ramos, cuando le dijo: 1: Entregaré el poder en cinco años,  2: No nacionalizaré ninguna empresa,  3: No quitaré los canales de televisión al sector privado.

   Sin embargo, resultó público, notorio y comunicacional, que el farsante violó esas tres promesas.

   3: En 1998 Chávez dijo que él no creía en el socialismo, que eso era una idea superada. Pero, una vez elegido Presidente, se declaró socialista y manifestó que siempre lo había sido;  se enredó con frecuencia en sus propias mentiras y contradicciones. En una de sus peroratas afirmó: “el socialismo destruye al ser humano”. En realidad, la primera y tercera afirmación son ciertas en teoría y práctica. La segunda refleja su precariedad intelectual, que trataremos en otra ocasión.

   4: Chávez fue un botarate. A: Subastó 28 aeronaves del gobierno; remató 8 de los aviones de PDVSA; B: En 2002 se compró un avión Airbus por 65-70 millones de dólares de manera ilegal, ya que el dinero no estaba en el Presupuesto; C: En sus primeros tiempos habló de simplificar la estructura del Estado. “Demasiado Ministerios”, decía. Hoy hay más Ministerios que nunca antes en la historia del país, incluyendo uno “para la felicidad”, en manos de gente incompetente.

     5: Para no hacer largo el “cuento” –que no es tal, sino Historia reciente,  leer “La Gran Farsa”, Balance de gobierno de Hugo Chávez 1998-2012, Alberto Quirós Corradi, (Compilador) Libros de El Nacional, 2012-, lean estas “menudencias” del botarate: “cambió el liqui liqui por los trajes de Clement, luego por la ropa de Giovanni Scutero; comenzó a comprar los trajes directamente de Nueva York, a la sastrería Brioni. En 2004 apareció en TV con un traje de Lanvin de 300 dólares y un reloj Cartier. Adquirió otros varios relojes, Rolex, un Patek Phillipe de 30.000 dólares, y, se dice, uno suizo muy exclusivo de 150.000 dólares. En esa misma época acuñó una de sus mentiras favoritas: “ser rico es malo”.  Había descubierto que podía gastar impunemente el dinero de la nación.

6: La paráfrasis anterior, y sus comentarios agregados, corresponden al artículo “Hugo Chávez: la Farsa de la Honestidad”, de Gustavo Coronil, publicado en Los Libros de El Nacional 2012 mencionado en el punto 5 supra. Fueron hechos incontrovertibles, cuya recordación no admite imputación de falta, delito, ni de nada. Hacer memoria de ellos no es irrespetuoso ni ofensivo, como lo prueba el hecho de que al propio interfecto no le provocó frío ni calor el referido libro.

7: Hugo Chávez, en su gran farsa, pretendió ser muy superior a Jesucristo, Don Quijote y Simón Bolívar juntos, revueltos y encabritaos. El régimen usa la perversa hegemonía comunicacional, para simultáneamente endiosarlo,  idiotizar a los ciudadanos y perpetuarse en el poder, al modo de las dictaduras militaristas. Continuaremos desmontando esa farsa y la de Maduro, que la continúa.