Vecinos de la carretera nacional, al sur de Tucupita, exigieron al gobierno municipal que gestione la sustitución de las luminarias en esta zona, ya que al caer la noche algunos sectores permanecen completamente a oscuras.
Adriana Rodríguez, habitante de Boca de Macareo, manifestó que al llegar la noche las vías hacia los sectores de Boca de Macareo y Coporito parecen una “boca de lobo” por la oscuridad que los rodea ante la falta de nuevas luminarias.
Rodríguez destacó que los bombillos colocados en los postes de estas vías tienen “un tiempito” sin funcionar, por lo que al caer la noche todo permanece oscuro, lo que perjudica especialmente a los conductores, quienes no logran ver a tiempo los huecos que tiene la carretera en esta zona.
“Aquí, en esta zona, tienen que sustituirse los bombillos de los postes porque queda oscuro, oscuro cuando cae la noche”, añadió.
Alejandro Contreras, quien vive en Carapal de Guara, también expresó que esta vía permanece a oscuras cuando llega la noche, debido a que las bombillas de los postes están quemadas.
Aunque no precisó desde cuándo persiste el problema de alumbrado, Contreras aseguró que la oscuridad pone en peligro a los transeúntes, ya que además los conductores transitan a una velocidad “un poquito exagerada”, a pesar de que hay un reductor de velocidad en la zona.
“En la entrada, por donde está la estructura de la Virgen del Valle, eso por ahí también parece una boca de lobo por la oscuridad, y eso que es una vía principal”, lamentó.
Otro ciudadano, esta vez del sector Paloma, también se pronunció al respecto y manifestó que el gobierno municipal debe inspeccionar las luminarias de estos sectores y cambiar las que estén dañadas.
Aseguró que cuando llega la noche muchos lugares de Paloma se encuentran a oscuras. Aunque reconoció que bajo la administración de la exgobernadora Lizeta Hernández se instalaron luminarias, algunas bombillas “no aguantaron la pela” y se quemaron.