Pompilio Monroy Perales
1: Las desgracias actuales de Venezuela fueron pronosticadas acertadamente por Carlos Andrés Pérez, cuando advirtió: “si gana el chavismo, habrá un gobierno de delincuentes que destruirá al país”. Exactamente, así ha sucedido. Desde hace 21 años estamos padeciendo una farsa trágica, una revolución que solamente existe en la fantasía de sus promotores y cuyos beneficiarios son los más altos enchufados, socios y cómplices por acción u omisión consciente. Una revolución se hace para mejorar las condiciones de vida, no para empeorarlas por culpa del gobierno, como ha ocurrido en el país.
2: La Constitución Nacional ha sido traicionada desde sus inicios, impúdicamente, reiteradamente, por los Presidentes, Ministros y otros altos enchufados del régimen. Los ejemplos y comprobaciones sobran. Baste recordar las violaciones a los fines y valores supremos del Estado, y de sus principios fundamentales.
3: La Carta Magna establece que: “el gobierno de Venezuela y de las entidades políticas que la componen es y será siempre democrático, participativo, electivo, descentralizado, alternativo, responsable y de mandato revocable”.- Nada de socialismo, comunismo, ni Estado Comunal. Esas palabras ni siquiera aparecen en la Constitución.
4: En 2010, el mentor de Chávez, Fidel Castro, declaró en entrevista de Venezolana de TV: “el socialismo es el comunismo”. Posteriormente, su hermano, Raúl, refiriéndose a los regímenes de Cuba y Venezuela, afirmó, rotundo: “somos la misma vaina”.
5: El 2 de Diciembre de 2007, la Reforma Constitucional propuesta por Chávez fue rechazada por el pueblo en Referendo Consultivo. Tal “reforma” incluía las figuras del Poder Popular, Concejos Comunales y Voceros del Poder Popular, que no existen en la Constitución.
6: Sin embargo, el Gobierno aprobó cinco leyes para “fundamentar” el Estado Comunal. De esa manera desconoció y se burló de la soberana voluntad popular manifestada en el Referendo Consultivo, cuyo resultado debió acatar por obligación constitucional.
7: El pretendido Estado Comunal, ya rechazado, es inviable, primero, por la “burocracia genéticamente incompetente” portadora de ineficiencia; y en segundo, por la corrupción y la impunidad generalizada que la ampara.
8: Los Concejos Comunales, en su mayoría controlados por el gobierno, no reciben aportes financieros ni técnicos suficientes para que “el pueblo” ejerza directamente el poder en lo económico, político, ambiental, cultural, social…, por lo cual no hay participación, protagonismo, soberanía, corresponsabilidad ni descentralización. Los que son elegidos por los vecinos y quedan fuera de ese control, no son legalizados. Otra prueba de la gran farsa del “Poder Popular”; es completamente falso que el Pueblo formula, ejecuta, controla y evalúa las políticas públicas.
9: No obstante estas incontrovertibles verdades, la Asamblea Nacional del gobierno pronto aprobará la Ley de Estado Comunal, para afianzarse en el poder y perpetuarse imponiendo como sea el socialismo comunismo, que son la misma vaina que ha desgraciado al país.