El señor Yonni Ramos denunció que los surtidores de la estación de servicio “Tucupita”, ubicada en el paseo Manamo, están manipulados para- según Ramos- surtir un litraje inferior al que muestra la máquina medidora.
Él posee una camioneta y afirma que cada vez que surte su auto de combustible, este lo vacía en un recipiente para tener más control y así estirar el carburante una semana.
De acuerdo con el denunciante, la máquina despachadora muestra un litraje de 20, pero cuando este va a sacar el combustible para lo que ya explicado, solo le alcanza 15 litros. Aclara que no se debe al recorrido que hace, porque ya ha surtido lo que va a consumir su auto de ida y retorno a San Rafael.
Yonni Ramos explica que esta situación le pasa solo en la estación de servicio que está en el paseo, ya que ha sido surtido en otras gasolineras y ha vaciado 20 litros. “Ya estoy cansado, me han estado robando, esa bomba está robando a la gente, me ha pasado solo allí”.
El afectado insiste en que las máquinas que marcan el litraje están manipuladas, por lo que exige una investigación inmediata en este lugar. Finalmente lamentó que otros medios de comunicación le cerraran las puertas para formular la denuncia.
“En otros medios me echaron la burra pal monte, gracias a ustedes por hacer posible que esto salga a la luz pública”.
Lizeta Hernández, gobernadora del estado Delta Amacuro, ha mostrado tener “mano dura” con la operatividad de las estaciones de servicio. Primero les instó a diversificar todas las formas de pago y luego evitar el amiguismo a la hora de surtir. Todo ocurre en un contexto de reclamos por parte de la sociedad civil e investigaciones a nivel nacional del gobierno del presidente Nicolás Maduro.
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