La Sra. Adelaida Da Silva predica con el ejemplo, cuando no está defendiendo los derechos de los agremiados en la Cámara de Comercio e Industria tucupitense, se encuentra trabajando.

“A Dios rogando y con el mazo dando”, parece decir en esta Semana Santa, pidiéndole dicha y prosperidad al Altísimo para el país, sin darse el lujo de tomar un descanso. “Trabajando, trabajando y trabajando es como vamos a levantar Venezuela”, expresó.

Al consultarle por esta nueva iniciativa empresarial, es tajante al decir, “es la misma Orquídea, fue cerrada en tiempos de pandemia para cumplir con la norma del distanciamiento. Nos vimos obligados a abrirla, porque el pueblo nos lo pedía y respondimos a su solicitud”.

“Es como un self service, se sirve rápido y se come bien. Estamos tratando de prestar un servicio de desayuno y almuerzo, a buena calidad y a buen precio. De momento cerramos a las 8 pm, si la clientela nos exige cerrar a las 10 de la noche, a esa hora cerraremos”, expresó.

Manifestó la empresaria luso venezolana que pronto contarán con delivery, “debemos evolucionar, el mundo de hoy se basa en la tecnología y en la satisfacción del cliente, a esa dirección apuntamos”.

La Orquídea da a la avenida Argimiro García de Espinoza, frente al hospital materno infantil Dr. Oswaldo Brito, que es donde está su mayor clientela. “Son tiempos difíciles, pero no podemos rendirnos. La ciudad debe modernizarse y crecer, tenemos todo el potencial para hacerlo. Los servicios públicos deben mejorar; para poder avanzar, todos debemos colocar un granito de arena”, indicó.

“Por cierto, le doy las gracias al Banco de Venezuela, que nos apoyó. Recomendándoles que extiendan los créditos a un año, de lo contrario es difícil pagarlos”, finalizó.

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