Dicen que a la tercera va la vencida, pero con él “Moco” no sucedió, no pudo escapar, cayó por tercera vez.
De nombre Ronnier José Hernández Moreno de 25 años, purgaba prisión por violación, robo agravado y porte ilícito de arma de fuego.
Los muchachos del sagaz London lo sabanearon desde que tuvieran conocimiento de su huida y lograron su aprehensión.
Aprovechando la oscurana producto de la ausencia del servicio eléctrico, se fugó en horas de madrugada del pasado lunes del retén de Guasina. Poco le duró la dicha, la mañana de este martes era reo de nuevo.
La batida funcionó, la pesquisa se orientó hacia Los Cocos, San Miguel y El Cafetal, y fue certera. Siguiéndole los pasos, ubicándolo con precisión en dos o tres ocasiones, logró saltar tapias y muros escapándose. De nada le sirvió, más pudo la constancia policial.
Luego de tantearlo de cerca, fue sorprendido en la casa de un pastor evangélico, que irá a la cárcel con él. Según declaración de los funcionarios actuantes, el hombre de Dios, de nombre C. J. Guerra, pretendía trasladarlo a Trinidad.
Fugado dos veces, una ganándose la voluntad de las autoridades penitenciarias, quienes lo ubicaron en la cocina y dos, ganándosela de nuevo, para darle cabida en el templo, no escarmentó. En ambas defraudó, aprovechó la consideración para darle una puñalada trapera a la confianza.
En la comandancia de policía, en un calabozo de máxima seguridad pasará los venideros días, casi como los delincuentes celebres, con exceso de sombra y muy poco sol.
London reposa orondo, le ganó el duelo al segundo “Chapo” deltano, por segunda vez. Curiosamente los dos Chapos, los reyes de las fugas, están en Polidelta.
Nada fácil…
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