Una vez aclamado como candidato unitario de la Alianza Democrática Deltana, el Dr. Abraham Gómez hará uso del bagaje teórico adquirido como investigador de primer nivel del diferendo entre Venezuela y Guyana, constituyéndose en el Buen y Noble Oficiante, en el marco de la coyuntura que amenaza con descoyuntar la ADD, la postulación al unísono de dos compadres a la alcaldía capital: Salma y Chugaby.
El vecino de Lizeta, el primo de la mandataria y el exiliado del Psuv, se sentarán a sacar cuentas, sumar, restar, multiplicar y dividir para determinar que conviene, quien conviene y para que conviene. Un cuadro difícil más no imposible, en el cual cada cual se considera dueño de la razón y… de la votación.
El miembro de la Academia venezolana de la Lengua, tendrá que efectuar un diestro y desgastante manejo del músculo sin hueso, para lograr en 48 horas que el caso no llegue a la CIJ.
Al cabo de dos días, de los que ya queda uno, debe salir humo blanco y quedar claramente establecido quien luchará contra el contendor o la contendora del Psuv, contra Wilfredo Rodríguez, y contra los y las que salgan.
De lo contrario, estaremos ante la primera escisión importante de la oposición en el Delta, y un verdadero plomo en el ala para las megaelecciones del 21N.