Un grupo de padres que se han visto afectados por la falta de gestiones, retardo y no se sabe qué razones, esperando por un juez en la entidad, decidieron romper el silencio y dar a conocer lo que sucede en ese Tribunal de Menores.
Elaboraron un comunicado y están dispuestos a ir a cualquier lugar con tal de conseguir verdadera justicia para sus casos.
Reproducimos íntegramente el comunicado enviado por ellos a los medios de comunicación:
DENUNCIA PÚBLICA SOBRE JUEZ DE PROTECCION DE NIÑOS, NIÑAS Y ADOLESCENTES ABG. DANNY ALEJANDRO MALAVE RAMOS
Tener un hijo o hija representa la responsabilidad más grande que puede llegar a ejercer un ser humano, tal es el caso que cuando se tiene una familia y se echan raíces, uno jamás piensa que las cosas van a salir mal, y es cuando llegan los desencuentros, el desamor, la monotonía, la falta de comunicación, la desconfianza, cuando toca finalizar las relaciones de pareja. El problema no es finalizar una relación de pareja, pues ciertamente la vida continúa y ambos pueden conseguir en otras personas lo que sientan que necesitan, sin embargo, con nuestros hijos no ocurre lo mismo, pues ellos al tener consciencia de quién es su madre y su padre siempre se ven afectados por las separaciones, tal es el caso que en muchas oportunidades producto de la falta de comunicación debido a que las emociones nublan el entendimiento o por intereses específicos que desunen, toca judicializar los casos, obviando lo dicho por Albert Einstein que “la paz no puede mantenerse por la fuerza, solo se puede lograr mediante la comprensión”, es allí donde inicia un conflicto legal entre padres, familiares y amigos, pues el impacto es desmedido.
En nuestro Estado Delta Amacuro existe un Tribunal de Primera Instancia en Materia de Mediación y Sustanciación, en la actualidad a cargo del Abg. Danny Alejandro Malavé Ramos, quien se supone debería impartir justicia, Michael Levine afirmo que “tener hijos no lo convierte a uno en madre o padre, del mismo modo en que tener un piano no te vuelve pianista”, precisamente pudiéramos extrapolar este planteamiento de Levine al hecho de que no por ser juez significa que sea justo, honesto e imparcial, muy por el contrario, dicho juez haciendo uso de sus facultades legales se ha dedicado a menospreciar la importancia que tiene un hijo para una madre o un padre, en su accionar poco ético, toma muchas decisiones provisionales sin pruebas ni sustento que las justifique, pues el solo dicho de una madre o un padre no es suficiente basamento jurídico para menoscabar vilmente los derechos del niño o niña a ser criado por ambos padres; aun y cuando estos estén separados, el solo dicho de una de las partes no es prueba suficiente para determinar, mucho menos para dictaminar medidas.
El despacho del juez parece una extensión del archivo del tribunal donde deberían estar los expedientes para ser consultados por las partes y por sus representantes legales, secuestra los expedientes y cuando los usuarios vamos a consultarlos la respuesta en archivo casi siempre es la misma, el expediente se encuentra en el despacho del juez, así pasan días, semanas y meses. El ciudadano juez de acuerdo a su parcialidad hace en muchas ocasiones caso omiso de los resultados emanados por el equipo multidisciplinario del tribunal, constituido este por psicólogos, trabajadores sociales y abogados, quienes tratan de hacer lo mejor que pueden su trabajo; el juez cuando le corresponde establecer audiencias de mediación se aprovecha de la ignorancia legal de los usuarios y según el interés irregular que tenga en el caso no media, sino que se dedica a envolver, sugestionar y coaccionar con términos legales y jurisprudencias sacadas de contexto y no aplicables a todos los usuarios ni circunstancias por las particularidades del caso.
El ciudadano juez sustancia algunos expedientes de tal manera que en la instancia que le precede, el tribunal de juicio, muchas veces las jueces sabiendo la verdad no pueden tomar decisiones contrarias porque tienen que supeditarse a expedientes viciados, entiéndase que han sido armados para favorecer a una de las partes.
Es muy común y muy frecuente según el accionar de este juez, que los casos se encuentren en un limbo judicial, entiéndase esto como retardos procesales injustificados que a todas cuentas violan el debido proceso, suelen pasar meses para que establezca una audiencia, ha llegado al punto este juez de inhibirse, entiéndase como apartarse de un caso, y por ser el juez coordinador del tribunal de protección después de declarar a un usuario persona no grata con quien sostiene una enemistad, ha generado de forma deliberada, malsana, nuevamente el retardo procesal antes de seleccionar un nuevo juez que conozca del caso. Dicho juez no respeta el sentir de un hijo, el de una madre y el de un padre, maneja el tribunal como un bufete personal y declina la justicia ciega según el interés de sus ojos. Es realmente curioso que este señor se diga ser masón, mucho menos venerable, pues hasta donde se tiene conocimiento dicha hermandad se rige por los principios de justicia y rectitud, existen incontables masones que son excelentes seres humanos, íntegros en su accionar de cara a hacerle bien a la humanidad.
Hacemos del conocimiento del colectivo deltano que algunos de los miembros del Comité de Usuarios de Tribunal de Protección del Estado Delta Amacuro hemos realizado anteriormente de forma individual denuncias ante la inspectoría de tribunales, ante la Defensoría del Pueblo, ante el juez rector e incluso ante el Ministerio Público, pero como un solo árbol no hace montaña, hemos decidido organizarnos y formular un petitorio colectivo a nivel nacional, y para ello ponemos a la disposición el correo electrónico comitedeusuariostpnna@gmail.com, allí estaremos recibiendo sus denuncias e inquietudes y brindando a través de nuestros juristas la asesoría legal pertinente a los casos.
El amor por nuestros hijos nos dará la fuerza, energía y los recursos necesarios, no nos detendremos en la lucha por su bienestar, ya lo expreso Denis Lord “Una madre/padre no es el que da la vida, eso sería fácil, una madre/padre es el que da amor”, ya basta, este juez debe responderle al Delta, a la gente de un pueblo noble, a la gente que nos vemos las caras todos los santos días, y que sabemos quiénes somos buenas madres, quienes somos buenos padres, sabemos quienes nos preocupamos por nuestros hijos, el amor de una madre/padre sobrepasa cualquier entendimiento, y es con sentimientos que este juez juega día a día, vulnerando los derechos de los más débiles, la buena noticia es que ya descubrimos que no somos ni estamos solos y vamos a restituir los derechos naturales que tienen nuestros hijos, que yacen establecidos en la LOPNNA. Finalizamos con palabras de Friedrich Schiller quien atinó al asegurar que “no es la carne y la sangre, sino el corazón, lo que nos hace madres, padres e hijos”, de igual forma Elizabeth Stone quien afirmó que “Tener un hijo es decidir para siempre que vas a tener a tu corazón caminando fuera de tu cuerpo”.
Prensa Comité de Usuarios del Tribunal de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes del Estado Delta Amacuro.
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