José Cedeño
Sic.
La sociedad tiene distintas formas de expresar sus manifestaciones deportivas, también, cómo conquistar lo que se proponen los atletas; lo planificado por los entrenadores y sus equipos de trabajo en cuanto a lo deportivo; lo que desde la gerencia se ha visualizado en horas de trabajo, de proyectos con su gente en espacios que son necesarios, donde se deben involucrar a los protagonistas a fin de que en el transitar de la ruta, todas las miradas sean conocedoras y expresen las opiniones necesarias para tener la solides necesaria. Pero, es de destacar algunas situaciones que parecieran la excepción de cada equipo que llega a determinada competencia.
Los comentarios siempre están presentes en favor de algún deportista que por su forma pareciera que tuvo una formación distinta en cuanto al desempeño del mismo en los escenarios de juego.
En algunas ocasiones sucede, que, la formación de determinados deportistas se la dan solo ellos, y hasta se les permite jugar a su gusto porque desarrollan buen juego de equipo, y lo hacen de forma individual cuando lo creen estrictamente necesario, tienen esa capacidad. Viene a la memoria producto de lo escrito, que el día 2 de julio del año 2015 escribimos por el presente espacio una columna que lleva por nombre: “Cuando el deporte es del pueblo.” Ello fue con ocasión del título obtenido por la selección Venezuela de fútbol de salón femenino en el campeonato suramericano celebrado en el hermano país de Colombia para el mes de junio del año señalado. Sólo que ahora, es preciso señalar, que cuando el deporte es del barrio, se puede apreciar lo que antes se ha estado señalando con respecto a los deportistas que hacen vida en algunos equipos.
Es una de las tantas cosas buenas que se puede disfrutar del barrio, por eso, cuando de una forma no tan agradable algunas personas expresan de forma oral o escrita “vallan para los barrios.” Quien suscribe, se queda en silencio unos treinta segundos aproximadamente, y luego se permite la expresión: tiene razón que vayan para los barrios para que además de lo que permiten ver de los deportistas en su máxima expresión, se permitan observar otras cosas lindas que tenemos en el ámbito de nuestras comunidades.
Lo escrito de hoy es como para indicar varios nombres de los que han destacado, y de los que destacan en nuestros barrios, solo que el espacio de hoy es de resaltar, que cuando el deporte es del barrio, el disfrute es mayor, a plenitud, enamora, y de referencia para la competencia de los menores, de los mayores y de quienes siempre se interesan de temas que van más allá de lo que se acostumbra.
Cuando algún atleta de nuestras comunidades está en la selección nacional, o participa en alguna competencia internacional o nacional de renombre, entonces se dice con orgullo la expresión: “ese es de mi barrio” y además la sintonía por los medios o las redes sociales es total porque está o juega el o la del barrio. Situación que llena de orgullo a quienes tienen la oportunidad de compartir con esos héroes o heroínas, que se tienen en las distintas comunidades, que se tienen como los nuestros, los de aquí, los de allá y eso sucede cuando el deporte es del barrio.
¡Amigas, amigos, que viva la gente humilde, sencilla, y de buen corazón! Ya en las pascuas, y por tanto deseo para todas, todos quienes acarician la presente lectura con sus miradas, una gloriosa navidad para ustedes y sus familiares.
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