Alias “Tribilín” tenía el modus operandi más sencillo y elemental del ámbito delincuencial, tocaba con suavidad las puertas de los hogares tucupitenses y luego que las abrían, se desataba el infierno.
Este bribón de apenas 22 años, de nombre Asdrúbal Prado Bompart, es desertor del Ejército y experto en supervivencia al extremo, de hecho, conoce la zona boscosa de Los Cocos como la palma de su mano y a través de ella, se desplazaba en compañía de 3 cómplices con suma facilidad abordando casas de San Miguel y El Torno, preferentemente.
El grupo de vándalos sometía las víctimas, las amarraba, si era posible las violaba y cargaba con todo lo que tuviese valor y pudieran echarse al hombro.
Este domingo en horas de la noche la suerte se le acabó y en medio de la oscurana, al sentir el característico toc toc, presumiendo lo peor, un padre de familia llamó sigilosamente al cuadrante de Polidelta.
El sagaz London, Com/J del órgano policial direccionó la acción y el inquieto Sup/J Galindo articuló los desplazamientos de la comisión del SIP (Servicio de Investigación Penal), logrando darle captura.
Los tres «asociados» huyeron y “Tribilín” forcejeó oponiéndose a la autoridad hasta que fue reducido.
Sujetas sus extremidades superiores de “perro” cazador, bajo sombra en la comandancia de Polidelta, a salvo de los caimanes, tigres mariposa y culebras que enfrentaba en sus aventuras en la selva, resta por atrapar a Pluto, Mickey, Donald y Minnie, una cachorra menor de edad que los acompaña y es tan temible como cualquiera de ellos.
Si alguien sabe del paradero del cuarteto en fuga, se le ruega llamar a cualquiera de los cuadrantes.
El caso reposa en manos del Ministerio Público, que tendrá que olvidar la simpatía por los comics de Disney y juzgar a este “Tribilín” deltano como lo que es, un ratero de marca mayor y quizá un “pegador”, que es como decir, un asesino.