Al que le toca “armonizar” está de cumpleaños: Luis Carrasquel

A Luis Javier Carrasquel lo salva su temperamento afable, si no, ya habría migrado por la constante presión del comercio deltano.

Depositario de una tarea difícil, a su apariencia de enorme oso pardo, lo acompaña una serenidad evidente, a prueba de balas, que lo convierte en un funcionario público distinto, ni engreído ni soberbio, ni sobrado.

Ahora le toca “armonizar” los tributos, un nuevo reto en su trayectoria, en tiempos en que los emprendedores y empresarios, les resulta cuesta arriba cancelar.

Que Dios le de salud, paciencia y sapiencia para alcanzar los objetivos que le han sido impuestos y debe cumplir.

 

 

Compartir contenido
Anuncios
Visitas: 24